Rumbo al DRJF 2019 - Sosúa -The Dominican Jazz Project
Entrevista a Stephen Anderson - 1 de 2
La agrupación The Dominican Jazz Project ha sido invitada a cerrar las presentaciones del vienes 1ero de Noviembre en Playa Alicia, Sosúa, en esta versión 2019 del Dominican Republic Jazz Festival.
El grupo está conformado por músicos dominicanos y norteamericanos, que, unidos por el amor al jazz investigando y creando con las raíces de la música dominicana, crean la agrupación. Las ideas musicales compartidas por Stephen Anderson (Piano), Guillo Carias (Trompeta y Flugelhorn), Jeffrey Eckels (Contrabajo), Sandy Gabriel (Saxofones), Guy Frómeta (Batería), David Almengod (Percusión), Edward Thigpen (Trompeta) y Carlos Luis (Guitarra y Voz) se concretizaron durante su encuentro en septiembre del año 2015, en Carolina del Norte, Estados Unidos; y, con los auspicios de la universidad de aquel estado grabaron un CD con el nombre de la banda como título.
Nos reunimos, haciendo uso de la tecnología, con su líder, el pianista, compositor, arreglista y educador norteamericano Stephen Anderson. Preguntas y respuestas fluyeron, y de este encuentro publicamos la entrevista en dos partes, para mejor provecho de nuestros lectores. Iniciamos con esta primera entrega:
Jazz en Dominicana (JenD): En tus propias palabras: quien es Stephen Anderson?
Stephen Anderson (SA): Soy pianista, compositor y profesor de profesión, y en casa soy esposo y padre de 4 hijos. Como músico, todos mis títulos universitarios (licenciaturas, maestría y doctorado) están en composición clásica, aunque toqué el piano en todos los grupos de jazz durante mi educación en la Universidad Brigham Young y en la Universidad de North Texas. Tomé casi todos los cursos de jazz disponibles, y siempre toqué profesionalmente para ganarme la vida y pagar la escuela todos esos años. He sido profesor de música en la Universidad de Carolina del Norte durante 14 años enseñando composición clásica y jazz (piano, improvisación, teoría, arreglos, combos e historia del jazz). Una cosa que aprecio de mi empleador es que, aunque la enseñanza en la universidad es obviamente importante, valoran mucho y enfatizan la investigación del profesorado (especialmente la investigación global y la actividad internacional), que para mí es componer, viajar y dar conciertos y clases magistrales, y sacar grabaciones de forma regular. Cuando era un nuevo miembro de la facultad, me proporcionaron fondos para estos proyectos para ayudarme a mí y a otros jóvenes profesores a comenzar. Con ese apoyo financiero, lancé tres CD de jazz del Stephen Anderson Trio y otra con 360ᵒ Jazz Initiative. Cada proyecto presentaba mis composiciones originales, y los CD fueron publicados por el sello Summit Records antes de que ocurriera la grabación de The Dominican Jazz Project. También he compuesto varias obras clásicas para orquesta sinfónica, conjunto de vientos, una gran obra para coro y orquesta de cuerda (por ejemplo, mi oratorio de siete movimientos Isaiah), así como algunas obras de cámara más pequeñas. Este año, estoy muy emocionado de que mi pieza, Concierto para Puerto Rico, se estrenó el verano pasado por la Orquesta Filarmónica de Cali, el Maestro Germán Gutiérrez, Director, y el Dr. Juan Álamo, solista de percusión en el Festival Internacional de Percusión, Tamborimba en Cali Columbia. ¡También estoy muy emocionado de que mi oratorio Isaiah tendrá su premier en Europa en el Festival Internacional Musiquem Lleida! a principios de octubre por la Coral Shalom y la orquesta de cámara en Lleida, España.
SA: Es cierto que es un desafío mantenerse al día con todo lo que se supone que debo hacer en mi vida profesional, como esposo y padre, así como en mi vida espiritual, donde tratamos de tomar tiempo para ayudar regularmente a las personas en necesidad en nuestra comunidad. Tiendo a tener insomnio bastante, así que aunque nunca trato de levantarme temprano, a menudo estoy despierto a las 4 o 5 de la mañana, incluso después de trabajar hasta tarde la noche anterior. Así que me levanto y empiezo a trabajar en varios proyectos durante unas horas antes de que mi familia se despierte. He descubierto que esas horas a menudo pueden ser las horas más productivas para componer material nuevo, ya que hay algo sobre dormir y luego despertarse donde las nuevas ideas de composición a menudo juegan débilmente en mi mente cuando estoy en medio de una nueva pieza. . A menudo me despierto en el lugar donde lo dejé el día anterior, y hay una leve idea en mente que me ayuda a seguir adelante con la pieza.
Cada otoño enseño una clase de historia del jazz que tiene 300 estudiantes y cada verano organizo un taller de jazz de verano relativamente grande. Los estudiantes en la clase y el taller tienden a enviarme bastantes correos electrónicos, y siempre hay trabajo de comité en la oficina también. Intento ser eficaz, a la vez que lo más eficiente posible con el papeleo, para poder volver rápidamente a mis proyectos musicales. Tengo algunos días de enseñanza intensivos cada semana, pero cada vez que puedo encontrar un momento, trato de ir al piano para trabajar en una composición o practicar para un próximo concierto. Veo muy poca televisión, excepto unos minutos de noticias con mi esposa o tomar tiempo para ver una película con nuestros hijos.
En cuanto al equilibrio entre proyectos, cuando estoy en medio de una composición, tiendo a hibernar y a centrarme en escribir tanto como sea posible, y durante ese tiempo solo practico tanto como sea necesario y aprender la música de manera efectiva para el próximo concierto. Cuando estoy en medio de una temporada de conciertos pesada, es difícil encontrar tiempo para componer. Me encanta componer e interpretar por diferentes razones. Disfruto el componer grandes obras clásicas, ya que a menudo son proyectos que uno prepara durante más de un año, y el concierto es una ocasión muy especial en la que un conjunto también ha invertido tiempo en preparar la música. Por razones opuestas, me gusta el jazz porque hay muchas actuaciones y acciones de forma regular. Me encanta la libertad de componer en tiempo real con los músicos en el escenario. Realmente no hay nada como esa experiencia. También disfruto de las amistades que pueden resultar de tocar juntos en el escenario.
JenD: Cuando tocas, se dice que siempre eres preciso, intenso, ¨in the pocket¨ ... que tu tocar es una verdadera belleza. ¿Cómo llegaste a esto? ¿Quiénes te influenciaron?
SA: En cuanto a las influencias musicales, tengo muchos, tanto intérpretes de jazz como compositores clásicos. Pero en términos de tiempo, he aprendido mucho de cómo Keith Jarrett, Oscar Peterson, Benny Green, Chick Corea, Kenny Kirkland, Michel Camilo, Chucho Valdez y Gonzalo Rubalcaba expresan, articulan y colocan sus ritmos en el ¨beat¨. Cada uno tiene su propio toque único y colocación. Ha habido años en los que he escuchado profundamente a cada uno de estos artistas y he tratado de aprender las mejores cualidades de cada uno de ellos. También toqué con algunos grandes músicos de la Universidad de North Texas que eran muy precisos y exigentes con respecto a la colocación de éste, por lo que fue una experiencia muy valiosa que me ha quedado grabada. En lo que respecta a los compositores, como joven fui fuertemente influenciado por Lutosławski, Penderecki y Joseph Schwantner.
JenD: ¿En qué formato prefieres tocar?
SA: Prefiero tocar en un grupo pequeño en lugar de una gran banda. Hay mucha más acción y espacio para ser creativos en un grupo pequeño. Me encanta el formato de piano, bajo, y batería y he hecho muchos conciertos en este formato. Pero realmente disfruté la instrumentación de jazz latino de saxofón, piano, bajo, batería y percusión como lo hemos hecho con The Dominican Jazz Project. También toco en dos grupos de jazz latino en Carolina del Norte que tienen una instrumentación similar.
SA: Honestamente, creo firmemente fue por la gracia de Dios. Un reconocido músico de Santo Domingo, Guillo Carias, decidió retirarse en Cary, Carolina del Norte, no lejos de donde vivo. Él y su esposa solían venir a escucharme tocar a lo largo de los años y a menudo se sentaba a tocar con la banda. Una noche en la primavera de 2014, dijo: "Quiero llevarte a Santo Domingo". Yo estaba como "¡genial!" "Me encantaría." ¡Y él lo hizo! Tocamos en el Jazzomania Jazz Festival 2014 en Santo Domingo. El evento fue organizado por Carlos Francisco Elias y fue presentado por el programa de radio de jazz Quisqueya 96.1 FM. En ese concierto conocí al maravilloso baterista, Guy Frometa, y Guy gentilmente me invitó a regresar unos meses después para tocar con su grupo en el Festival de Jazz de Casa de Teatro. Allí conocí a Sandy Gabriel, y sentí que formamos una gran amistad y un vínculo musical juntos. Después de ese concierto determinamos que deberíamos grabar juntos. Con el aliento de Guy y Sandy, pasé los siguientes meses transcribiendo ritmos folclóricos dominicanos y tumbaos de piano. Luego los invité a servir como artistas invitados en el Taller de Jazz de Verano de la UNC, donde sirvo como director, y en los días posteriores al taller, grabamos en un estudio local. Compuse cinco temas para el CD, y Sandy una pieza muy bonita también. Durante mi primer viaje a la República Dominicana, Guillo nos llevó a escuchar al cantante / compositor y guitarrista, Carlos Luis. Me sorprendió la maravillosa belleza de sus composiciones, así que lo invité a unirse al proyecto y componer algunas piezas nuevas para la grabación. Y, por supuesto, Guillo Carias tocó con nosotros y contribuyó con una composición para la grabación.
Hasta aqui llegamos con esta primera de dos partes de la muy interesante entrevista a Anderson. En la próxima publicación seguiremos dialogando sobre el proyecto, sus giras, participación en el festival y más!!
Compartimos algunos de sus temas que se encuentran colgados en Youtube
Zona Colonial - https://www.youtube.com/watch?v=uXuykPdtS2A
Nuestro Mundo - https://www.youtube.com/watch?v=aK4eZe0yDZU
Por La Causa - https://www.youtube.com/watch?v=Suglf6FQUtM
Live at UNC (concierto completo) - https://www.youtube.com/watch?v=L-BXjRBWhpY
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