viernes, 11 de julio de 2008


Leo Blanco Quartet - Raíces y Efectos

El cuarteto del compositor y pianista venezolano Leo Blanco presentó el pasado jueves 10, en el marco del Festival de Jazz de Casa de Teatro, un concierto que gustó por su oferta de originales composiciones que fusionan el jazz con ritmos típicos de Venezuela y otros países de sur-américa. Nuevamente la “casa” estaba repleta de los “fans de la música de los músicos” como se acostumbra a denominar al Jazz.

Este cuarteto de músicos; todos no solo egresados de Berklee Collage of Music, sino profesores de la afamada institución; tiene un alto grado de preparación y virtuosidad técnica en sus respectivos instrumentos. Ellos estuvieron muy compactos en su forma de tocar (en algunas piezas se le notaba algo mecánico, en especial el saxofonista Rick DiMuzio); pero todos sabían que hacer, cuando hacerlo y como hacerlo. Los solos de cada cual muy bien presentados, muy limpios, muy originales; esto se pudo notar la noche entera, en especial en las personas de Leo al piano y Pablo Bencid en la batería.

Armonía, influencias africanas, ritmos sur-americanos, melodías de matices del oriente medio…todas fusionadas al Jazz para dar un sabor de “New Age con World Jazz” (Jazz del Mundo con Nueva Era) es el estilo de componer que utiliza Leo Blanco y fue el resultado del muy agradable concierto. La mayoría de las piezas de esta noche eran composiciones de Blanco y de su último álbum, “Roots & Effects”; y al final nos dejó ver que viene en su nueva propuesta con dos piezas del aún no estrenado “África Latina”.

Iniciaron con el tema principal del álbum antes mencionado “Roots & Effects” (Raíces y Efectos) para dejar establecido desde el principio como sería el resto de la noche. Roots es una balada de complejas melodías y armonías con matices rítmicas afro-sur-americanas. Interesantemente en esta primera pieza, el saxofonista DiMuzio (tenor) hace su mejor trabajo de la noche, sonando muchas veces a un joven John Klemmer, mostrando un dominio total del instrumento. Continúan con “Light Over Dark” en la que Leo hace uso de todos sus recursos en el piano, dando a entrever su excelente uso de la derecha en el teclado. Tambien Pablo deleita con su trabajo en los pedales y high-hats.

“Tornada de Cabrestero” es la tercera pieza y la única que no es de su autoría, si no del maestro venezolano Simón Díaz. Pieza que contiene muchos ritmos folklóricos venezolanos, llevada a cabo alegremente por el cuarteto. A ésta le sigue “Azul de Manicuare” otra fresca y muy viva composición que mantiene un 6x8 durante casi la pieza completa. En esta es que nos damos cuenta de que el bajista es fuera de serie, Fernando Huergo ha estado marcando excelentemente desde el principio; que manera de impresionar, sin mucha bulla, sin un solo hasta el momento, pero con una poderosa presencia en cada pieza.

La quinta pieza es quizás la mejor de la noche. “El Negro y El Blanco” es un homenaje al joropo “El Negro José” del afamado compositor venezolano Aldemaro Romero. Se destaca Bencid al reproducir los ritmos del joropo y el sonido de los tambores en la batería, y Huergo que no le pierda una a Pablo. El piano de Blanco es cristalino, mantiene mucha fidelidad a Romero y le añade su especial toque en las 88; la pieza cuenta con mucha pasión de su parte.

Luego de ésta presenta “Perú Landó” de su nueva producción “África Latina”; la misma cargada de variados ritmos de América del sur, y es en esta pieza que Huergo realiza su único solo, y que solo!!! Como domina el instrumento, firme y gentil a la vez, subiendo y bajando por el diapasón a una tremenda velocidad; mientras mantiene la marca, armonía y melodía sin esfuerzo alguno. Invitan al público a marcar con sus manos el 2-3 del cajón peruano, todos acompañan al cuarteto y lo disfrutan plenamente. Continúan con la pieza titular de dicha producción “África Latina”, la misma es una obra de arte de piano jazz latino, y Blanco se la “come” dando al publico su mejor trabajo de la noche en el instrumento. A juzgar por estas dos piezas, la nueva producción ha de ser todo un éxito por la gran variedad de ritmos, tempos y melodías que presentará al público.

Para terminar el concierto tocan “Waltz No. 5”. Un cambio total de lo que ha sido la oferta musical de la noche. Bella melodía que constantemente cambia de ritmos y tempos; buenísimo el trabajo de fraseos entre el tenor y el piano; descargas “controladas” de parte de la batería. Aquí todos y cada uno de los cuatro músicos se entregan totalmente de corazón y alma, se les nota el “feeling” que interponen a través de sus instrumentos.

Que manera de finalizar el concierto. Arranca olas de aplausos de los presentes y deja la sala con un sabor a una noche de Jazz, una muy buena noche de Jazz. Gracias Leo, Pablo, Fernando y Rick por su entrega!!!
Leo Blanco

Leo Blanco y Fernando Huergo

Rick DiMuzio y Fernando Huergo


Las fotos son cortesía de nuestro amigo, el fotografo Fer Figheras, y pueden ver su trabajo profesional visitando su página http://www.ferfigheras.com.ar

1 comentario:

Gabriel del Gottó dijo...

se nos desproporcionan las entrañas hermano mio!

sin jazz es un error estar vivo